martes, 25 de marzo de 2014







Salir de caño


con el olor a durazno


de la pintura podrida


el perfume de la miga de pan


en mi boca


y un libro deshecho.






Pensar temprano


es tan extraño


con pan que avergüenza


y la mansedumbre de la boca


que no recuerda.







lunes, 24 de marzo de 2014


Veo tu cara en sueños:

una nariz de espolón a proa,

unos labios de arena.

Siento que mi pecho

va y viene con el llanto de las cuerdas

mientras el suelo sepulta la vanidad del tiempo

y guarda de él unas herrumbres podridas.

Ese batir de alas y palabras

y páginas que se pierden en la noche,

en las cuencas de los faraones

que entre bálsamos y trapos ancestrales

dibujaron la historia,

es viento que sopla

el sílice que vuela en tu boca.

Es tu aliento que barre

el pesado atardecer del desierto

en que los perros aúllan aterrados,

y el corazón se escurre entre las manos.

martes, 4 de marzo de 2014











¿Qué pasa que ya no dejo sombra


ni gotas de amor en la espesura


y me he vuelto invisible


para el sol y la luna?


Desconfío de la penumbra


en el golpeteo de los viajes,


del fuego arrobador de la madera nueva,


de los candiles en la noche.


Algo en mis ojos se revierte


y se vuelve desierto


innumerable, y polvo que vuela


en remolinos.


Es como un sueño que despierta,


como el margay que trastabilla en la rama


y se hunde


y va hacia el cielo negro como un mar de tierra


y viene hacia mi con la tibieza del barco encallado


y el reboso del agua salada


que borda su paño.