La crueldad triunfa porque corre sin el peso de los
escrúpulos.
No hay nada más pernicioso y absurdo que una pedagogía de la
desconfianza.
Deberíamos comprender que exagerar es alejarse
de la verdad, no refrendarla.
Pensamos demasiado en lo que nos gusta.
La
suspicacia nos está volviendo idiotas.
Pasaron 50 años del mayo francés y la gente
camina mirando al suelo como si viviese en un monasterio.
La
interdicción de hablar con desconocidos es lesiva de toda posibilidad de
conocer a alguien.
Gente
reconcentrada, abatida, tensa, temerosa, prejuiciosa, constipada, necia,
ofuscada, triste y despreciativa.
Conozco a
varios alacranes.
Hagas lo
que hagas, siempre va a estar mal para alguien.
.No quieres
que te miren: esperas que aparten sus abyectos ojos de tu delicada humanidad.
El pueblo
disfruta el fracaso de las consignas románticas.
Siempre
se puede pensar dos veces antes de actuar y de hablar, pero es mucho trabajo.
Siempre
hay emociones, pero es frecuente que no sean las que uno quiere.
Estoy
convencido de algo todavía impreciso.
Intransigentes
con unos, indulgentes con otros: así gira el timón de nuestra imprudencia.
Es imposible revertir la estolidez de la gente
prejuiciosa cuando está muy afianzada.
Entiendan la penalidad
del filósofo, que no puede permitirse una amplia sonrisa.
Hay una forma segura de medrar y caer bien: es
prescindir de toda creatividad.
Si todo lo que podés hacer como artista es ser snob y rodearte de un cenáculo de
adulones, estás vacío. Como una de esas cajas de cartón que contienen huevos,
pero sin huevos.
¿Cómo
habríamos de entendernos si ni siquiera hablamos el mismo lenguaje?
Jamás se
te ocurra confiar en un hombre simpático.
¿A qué ejercicio de estoicismo te has entregado
últimamente?
Si se quiere incentivar el pensamiento, debería
enseñarse religión en las escuelas y en todas partes, porque un sujeto crítico
debe ser capaz de construirse una visión alegórica del mundo.
La
academia, para ser mejor, debería prescindir de su gusto por el estilo
desvaído, de su excesivo afán de actualidad y de sus sistemas de citación
desconcertantes.
Quienes hablan de "abordaje", por lo
general, me parecen piratas.
Dado que nada es más veloz que la luz, mirar
muy lejos en el espacio significa a la vez mirar muy atrás en el pasado.
El que no
tiene problemas, se los inventa.
Es, hasta
cierto punto, inocuo ir contra un sentido común que preconiza la punición y la
dureza, tributario, en parte, de las fisuras del Iluminismo. La locura por
averiguar la Verdad, caracterizada como algo único, puro y duro. La Verdad, en
esa línea, ha de ser violenta, no un juego de límites difusos. La Verdad ha de
ser lucha sin cuartel, sufrimiento, compunción, sacrificio inútil, esfuerzo
denodado sin ayuda y sin descanso. La Verdad ha de ser algo directo, sencillo,
triste y definitivo.
Hay
muchos que sueñan con irse a ese planeta parecido a la tierra, pero más grande
y más hermoso, pensando que en él no habrá melancolía.
Centro comercial. Un gran túnel de vidrio
invadido de olor a Provenzal. En él se juntan todas las formas de esparcimiento
en un punto: comida, descanso, paseo, consumo irresponsable, acicalamiento. En
una sinopsis brutal, aparece el reboso de siglos de cultura occidental. Una
enciclopedia de la molicie. Los cubrecamas se impregnan de fritanga. La
disquería exhibe los discos con una clasificación que tiene toda la meticulosidad del capricho. La empleada se
comporta con la misteriosa adustez de una máquina. El “patio de comidas” es un
escenario de miradas duras y pudorosas. En los pasillos, unos stand de perfumes aburren a unas
promotoras melancólicas que sueñan con el sol en la piel. Baños, Cines, todo
parece cortado a la medida de alguien que no soy yo.
Los comerciantes,
un hato de provincianos sin elegancia. Los transeúntes, indolentes, huecos e inhumanos,
exudan el desprecio por la piel: se refugian en las vidrieras para no ver la
mirada y la mano que pide.
"Puesta en valor" de un antiguo
chalet. En el frente, un contenedor con caños de plomo y un antiguo orinal. En
los fondos, una pala mecánica.
Buena
parte de los males se deben al hábito de admirar a quien debería ser abominado.
¿Y si el
hombre se equivocara siempre? ¿Si sufriese la eterna desavenencia entre el
tiempo y el azar?
La
tontería es lenta para comprender y rápida para juzgar.
Cuando
mucho, podemos aspirar a una bella imperfección.
Hay algo
de Apocalipsis en los escaparates que dicen "últimos días".
Qué clase
media tan ramplona, ignorante, indolente, reaccionaria y vacía.
Cada vez hay más personas que dicen "ni idea".
En la próxima vida prometo que voy a complacer a todos y ser inteligente, sociable, previsible, conciliador, optimista, craso y correcto.
Estoy
ansioso por mirar series de televisión que me envilezcan y atrofien mi
sensibilidad.
Estoy harto de que los publicistas me tuteen.
Mientras limpian el aula, enfrento al sol a
través del enrejado. Una polilla se me acerca: manchas oscuras en las alas. Se
precipita sobre mi pulóver como si me conociera, y con el dedo la llevo de
vuelta a la pared. Me doy cuenta de que nunca deja de temblar, como si fuese un
viejo camión Bedford: un camión que vuela.
La señora pregunta a los empleados de qué
cuadro son y éstos lacónicamente afirman ser uno de River y otro de Boca. Ella
comienza a hablar de su familia, que es de Racing, y su marido, que nació en
San Antonio de Areco, de apellido Corbatta, primo de Oreste Omar Corbatta,
gloria de Racing. La señora dice que Corbatta "era un Maradona". Yo
recito para mis adentros: Corbatta, Mansilla, Pizzutti, Sosa y Belén. El
empleado de la caja, serio, parco y práctico, no le contesta y no la oye.
Me siento inspirado. voy a escribir un poema
sobre el saquito, la bici, los pibes, la birra y el faso.
El poeta Matías Moscardi, que solía ser un tunante, abrazó la
vida religiosa.
El poeta argentino Juan Diego Incardona afirma que deberíamos escribir cosas como "la pared está triste". Obediente, el cantante Pablo Ruiz compuso una canción que dice "estoy llamándote mi amor, y tu teléfono no quiere contestar".
Escuché por la radio una canción que dice
"conocía mi interior como bola de cristal". Se refiere a la transparencia
de la bola de cristal o a sus cualidades adivinatorias? ¿Y lo que se conoce es
propiamente la bola de cristal, o son otros hechos, situaciones o estados de
cosas los que se conocen a través de ella?
El problema
de la poesía actual es su dependencia de la palabra y la referencia. Confío en
que la poesía del futuro se reducirá a gestos.
'Clases Abiertas' de Piglia sobre narrativa
argentina...
Las
personas jóvenes usan el anglicismo "banner", someramente traducible
como "bandera" o "cartel". Borges (que nació un 23 o 24 de
agosto) fue un precursor en su uso poético:
Siempre
el coraje es mejor
la
esperanza nunca es banner;
vaya pues
esta milonga,
para
Jacinto Chiclanner.
Hay que
estar muy pendientes de las garrulerías que diga Vargas Llosa.
Soñé que tus
ojos me mataban de golpe, que tus manos eran caballos al galope, y tu voz
arrullaba mi sueño.
Sus ojos,
mirando al cielo, vibran con el estupor de la piel.
Va a
llegar un momento en que todos nos llamaremos Kevin.
Hoy un
alumno me hizo notar que Sandro podria adscribirse al idealismo subjetivo en
virtud de aquella expresión que dice "tengo un mundo de sensaciones".
Me retracto
de todo lo que dije la noche del jueves.
No sé si
creer o no en la racionalidad de la ciencia, pero por las dudas pongo los
zapatitos.
Soñé que
había tomado un poco de Barbera, pero necesitaba algo más.
Soy un shapori poderoso, lo que pasa es que mis
hekuras están débiles.
Me
dijeron que en el cielo no hay sillas de plástico, ni ropa de manta polar, y
que los shorts de baño llegan hasta la mitad del fémur.
Los profesores de gimnasia no tienen por qué soportar que se los obligue a peinarse con rodete y vestirse con prendas de siré.
Abrazar a
los árboles era una solución perentoria para aliviarlos del frío, por eso,
algunos, con notable ingenio, les tejen pulóveres.
Si su
hijo utiliza a menudo la palabra "rosca" puede estar involucrado en
las peleas callejeras, la política universitaria, los melindres amorosos, la
panadería, la pascua, los reyes, la bulonería, la cañería, los repuestos
sanitarios, la literatura de Henry James o la afectación de las clases altas.
Deberia existir el Día del Silencio.
Fantasma
oscuro, de piel trajinada por el sol del estío: ¿Han soñado alguna vez tus
manos con la blanca caricia, y tus ojos con el verdor de la amatista?
A tal pedal ama la de plata.
Un artefacto de fierro y plástico vale cinco veces más por denominarse "juguete". "Juguete" es una entelequia carísima.
Lo que en el cuento infantil "los tres cerditos"
era la perentoriedad de cada una de las casas, está representado en el dibujo
animado "las chicas superpoderosas" por el cuerpo: si
"bellota" aparece como la más dura y duradera, "bombón"
está a expensas de ser derretida o devorada sin dilaciones. "burbuja"
desde luego, es la más efímera.
Ojalá que dejen de usar la expresión "vuelta al cole".
Competitivo, chulo, arrogante y prepotente, el
Topo Gigio afirmaba "lo dije yo primero".
Los
directivos reprenden a las estudiantes por usar ropas con estampado "animal
print", ignorando que las mujeres de las cavernas se vestían con piel de
leopardo.
"Pet
Shop": más suave que "venta de animales".
Los dragones se extinguieron a causa de la
invención de los matafuegos, extinguidores por excelencia.
Sin tracción a sangre no habría Don
Quijote, Cantar de Mío Cid, Chanson de Roland, Martín Fierro, Don Segundo
Sombra, El Caballo y su sombra.
Ella me miraba como si fuese un orangután que
acaba de devorar a su compañero de jaula.
¿Esas
personas de expresión vacía y ropa ridícula son las celebridades?
No hay nada más subversivo que una berenjena.
.
Cosa
extraña y contradictoria: el racismo es a veces un artículo de exportación. La
veneración por lo extranjero, sobre todo si es discriminatorio, grosero y
gazmoño, podría hacer que tengamos nuestro propio “amanecer dorado”.
Los inmigrantes son el 4% de la población del país, y generan
más dividendos que los que se gastan en ellos. Necesitamos que vengan más
inmigrantes pacíficos y de buena voluntad para mitigar la arrogante violencia
de la sociedad argentina, violencia mimética, tributaria del avasallamiento de
las conquistas europeas del siglo XVI: una brasa que después de quinientos años
sigue prendida.
¿Cuantas manifestaciones de microfascismo de parte de argentinos de clase media soportaste hoy?
¿Les parece insólito el advenimiento de la
derecha? Es el epifenómeno de lo que cada uno de nosotros lleva en su corazón,
la expresión amplificada de nuestras formas cotidianas de pensar y actuar.
La
derecha nacional confiere una importancia hiperbólica al chorizo.
Hagamos
una "guerra de Dios" contra el restaurante MacDonald's.
Es una
carrera para ver quién es funcional a las derechas de un modo más ingenioso y
refinado.
Los
argentinos tenemos mucho que aprender de la ética de los europeos. A partir de
mañana nos dedicaremos al coloniaje, las guerras de expansión, el esclavismo y
la depuración racial.
Tendría
que haber una calle que se llame "Rosas, frío corazón de hielo”.
No tenemos esperanza mientras nos eduquemos a
través de la publicidad, los videojuegos y las series norteamericanas.
Buena
parte de la culpa la tiene Elvis Presley.
Quienes
están a favor de salvar las dos vidas se olvidan de los mellizos Barros Schelotto,
las trillizas de oro, los quintillizos Riganti o los sextillizos López.
estrictamente habría que hablar de la salvación de las dos, tres, cuatro,
cinco, seis, siete, ocho o nueve vidas.
Los que
dicen que las jovencitas se embarazan para cobrar la asignación parecen
desconocer las delicias del tálamo.
Una chica
envuelta en una mañanita negra, desde la ventanilla de un taxi, me dice:
“Bebé,
cómo te haría el amor gratis”
(¿”Gratis"?....)
Veo venir cuatro pelos renegridos y cuatro
uniformes. ellas cantan "ponga huevo y corazón". Contraste de las
voces núbiles y la canción guaranga.
Cuando un
hombre tiene una idea, la reconoce con dificultad y toma ante ella una
distancia culpable. Hay, en cambio, algo maternal en el modo en que una mujer engendra
y ama sus ideas.
Reconozco, al menos, dos clases de belleza
femenina: una, lastima el sensorio por un exceso de positividad, desborda y
duele. La otra, invita al descubrimiento y la asimilación, y es por esencia
sibilina. La primera exige un sentido perfecto; la segunda, cierto esfuerzo en
el desciframiento.
Si tu
pareja cuida mucho su apariencia, es probable que esté interesado/a en alguien
más.
Si luce descuidado/a es porque acaso has dejado
de importarle lo suficiente.
Si te acusa de engaño, seguramente quiere que sientas mortificación o busca pretextos para acabar con la relación.
Si no le importa que le engañes, tal vez simplemente no tiene interés en ti.
Si monta una escenita de celos, es porque experimenta dudas e inseguridad: ¿qué ocultará?
Si no te cela, mal signo! Pronto dejarás de estar en sus planes.
Si actúa distante, es probable que esté buscando un modo indoloro de concluir la relación.
Si muestra demasiadas lisonjas, ¡cuidado! Puede que lo haga por sentirse culpable.
Si te acusa de engaño, seguramente quiere que sientas mortificación o busca pretextos para acabar con la relación.
Si no le importa que le engañes, tal vez simplemente no tiene interés en ti.
Si monta una escenita de celos, es porque experimenta dudas e inseguridad: ¿qué ocultará?
Si no te cela, mal signo! Pronto dejarás de estar en sus planes.
Si actúa distante, es probable que esté buscando un modo indoloro de concluir la relación.
Si muestra demasiadas lisonjas, ¡cuidado! Puede que lo haga por sentirse culpable.
Hay
hombres a los que las mujeres no ven: dignos espectros, con sigiloso
paso de onza.
Las
efusiones de la izquierda vernácula son un juego limital. "¿Hasta dónde se
puede llegar?" es la pregunta que tiene en vilo a propios y extraños.
Me he preguntado si en la alusión de la marcha peronista a la "realidad efectiva" hay un soplo de hegelianismo.
Debe ser difícil para otras culturas entender
que los occidentales se inmolen por una selfie.
La modernización es un gas deletéreo, causa de
nuestra muerte lenta: una fuga de los signos vitales que presenciamos con los
brazos caídos.
Camino a
la farmacia, caigo en la cuenta de que vamos a vivir muy poco.
Hay que
vivir cada día como si fuera el último, el primero o alguno de los del medio.
Todo debe ser sacrificado en el altar de la
belleza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario